Félix Espoz / Pablo Eguizábal. Madrid
Desde 1978, año en el que nace, la Clínica la Luz se ha convertido en una institución de prestigio dentro de la sanidad española, ahora reforzada con un nuevo equipo directivo liderado por Joaquín Martínez, quien asegura que los puntos fuertes de la clínica son el trato personalizado, los médicos de prestigio, sus instalaciones y la tecnología, y que el proyecto a futuro va encaminado hacia fidelizar a sus clientes y su atención integral, hacia las acreditaciones de calidad y a conseguir la máxima eficiencia posible.
¿Cuántos pacientes atiende al año la clínica? ¿Predomina entre ellos alguna aseguradora de salud?
Atendemos unos 5.000 ingresos al año y unas 40.000 consultas externas. Y desde el punto de vista de las compañías con las que trabajamos, nuestra voluntad es trabajar con todas, si bien, hay algunas con las que lo hacemos más, lo que está relacionado con las pólizas que tienen esas compañías. Con la que más colaboramos es Adeslas, pero insisto, la voluntad de la clínica es hacerlo con todas.
También tenemos otros colectivos, como el colegio de abogados, arquitectos y algunos otros.
Nos gustaría que nos hablase sobre cómo funciona la citación de los enfermos y cuánto tiempo medio de espera necesitan para ser atendidos.
La citación de los enfermos se puede hacer de diferentes formas. Telefónica, o bien directamente a la especialidad que quieren contactar, si son pacientes que ya han sido vistos en la clínica ya tienen un teléfono directo, o se puede contactar directamente a través de la centralita. Y, muy pronto, vamos a modificar la página web de la Clínica para poder realizar la cita online, indicando la especialidad, facultativo o la prueba que quiera que se le realice. La idea es facilitar cualquier medio de citación e incluso utilizar las nuevas tecnologías para que los pacientes no tengan ningún problema.
Respecto al tiempo de espera, tras la solicitud del paciente, al día siguiente se le ve o se le realiza la exploración. En este sentido, cuenta a nuestro favor la flexibilidad de la clínica para atender a los pacientes de forma prácticamente inmediata.
¿Con qué medios tecnológicos cuenta la clínica?
La clínica tiene una dotación tecnológica envidiable. Contamos con dos resonancias de 1,5 teslas, tomografías computarizadas, Pet/Tac, acelerador lineal, la braquiterapia que presta esta institución es excepcional y desde el punto de vista de soporte para pacientes críticos tenemos una Unidad de Intensivos, una Unidad de Cuidados Intensivos para el Paciente Cardiaco… es decir, la tecnología que tiene la clínica está a la última. Por supuesto, ecografía, radiología convencional, etc, e incluso una sala para intervencionismo cardiaco, vascular y hemodinámica. La dotación tecnológica que tenemos es perfecta.
¿Cuáles son los puntos fuertes que tiene, los que le hacen diferenciarse y destacar?
Yo creo que los puntos fuertes de la clínica son, por una parte, el trato personalizado que todo nuestro personal le dedica a los pacientes. Esto es una cuestión importante. A parte de eso, el prestigio de los médicos que trabajan aquí, que ha hecho que a lo largo del tiempo, desde 1978 hasta ahora, la Clínica La Luz haya sido un referente dentro de la sanidad privada española. Esto se sigue manteniendo y, de hecho, gran parte de nuestros clientes son clientes privados que acuden con determinados facultativos que son de su confianza, por el prestigio que tienen.
Aparte de estos puntos fuertes, y la tecnología, que ya la hemos descrito, las propias instalaciones de la clínica ofrecen comodidad y confort a los pacientes. Tienes unas instalaciones muy agradables, lo que se ha cuidado mucho para que el paciente que está molesto por su enfermedad se sienta lo más cómodo posible.
La clínica mantiene colaboraciones con otras empresas y clínicas. ¿Este tipo de colaboraciones son estratégicas?
En estos momentos las colaboraciones con otras clínicas, en concreto con la Clínica Miramar de Alicante, son importantes para nosotros. La idea es incrementar ese tipo de colaboraciones. Tener alianzas estratégicas con otras clínicas es relevante porque se pueden compartir determinadas cuestiones, no solamente en el ámbito médico, sino en los suministros y también de cara a negociaciones con otras empresas. Nuestra idea es impulsar este tipo de alianzas.
Acaban de nombrarle. ¿Qué valoración hace de estos pocos días que lleva en el cargo?
No solamente me han nombrado a mí. Yo soy el director gerente, pero nos hemos incorporado un nuevo equipo de dirección. Los tres ya conocíamos desde hace mucho tiempo el proyecto. Rafael Alfonso es director Médico, Rafael Peláez es el director Financiero y me he incorporado yo. Es una apuesta importante del Consejo de Administración por un equipo que emprenda una etapa con la idea de adaptarnos más a los nuevos tiempos.
La primera valoración es muy positiva. Me la he recorrido entera. Estoy encantado. Es una clínica entrañable, es muy agradable. A parte de esto, me he reunido con todos los médicos ya y les he expuesto las ideas que queremos desarrollar. La impresión no puede ser mejor.
¿Cuáles son esas líneas de futuro a las que se va a encaminar la institución?
Un objetivo clarísimo que tenemos es reafirmar el liderazgo que tiene la clínica en la sanidad privada española. Queremos mantenerlo y potenciarlo. Tenemos especialistas de prestigio que atraen a pacientes de diferentes puntos del país. Estamos incidiendo en desarrollar una serie de líneas.
La primera está dirigida a los clientes. Fidelizar a nuestros clientes. Para nosotros el trato personalizado al cliente es fundamental. Además, queremos seguir captando a los mejores especialistas de las diferentes áreas de la medicina. Esta siempre ha sido una voluntad de la clínica desde su fundación.
Queremos crear también una serie de líneas propias y diferenciales, en las que los pacientes visualicen que de una forma integral podemos resolver sus dolencias. Si una señora, por poner un ejemplo, piensa que tiene algo en una mama, que tengamos una unidad integral de mama para que le podamos resolver el tipo de problema que sea. Nuestra idea es ir creando unidades multidisciplinarias que actúen sobre nuestros clientes de una forma integral. Que resolvamos el problema de fondo y los colaterales que haya podido crear en el bienestar del paciente.
Se lo hemos comentado a los médicos y están de acuerdo en seguir por esta línea. Y queremos potenciar nuestra cartera de servicios. Contamos con prácticamente todas las especialidades, pero vamos a incrementar algunas de ellas.
En la clínica también vamos a emprender una línea importante referida a la calidad. Esto no significa que no estemos dando calidad, sino que queremos constatarla mediante las certificaciones que en estos momentos existen.
Por otra parte, basándonos en que es una clínica muy eficiente, la eficiencia debe ser el norte de cualquier empresa, y evidentemente el de nuestra clínica también. Lo que no significa, ni mucho menos, disminuir la calidad, sino todo lo contrario. La calidad es lo primero.
La crisis está afectando a todos los sectores incluyendo al sanitario. En un entorno como este ¿cuál es la mejor forma de posicionar a la clínica?
La crisis está afectando a todo el entorno económico español. Quizá a las clínicas privadas nos afecta algo menos. Hay una población que está pagando sus pólizas de seguros. Las pólizas no han disminuido, incluso en 2010 se incrementaron un 3,4 por ciento. Por otra parte, en lo referente a clientes privados puede haber cierta mengua, pero hay otra población que no está tan afectada por la crisis económica y sí sigue manteniendo recursos para obtener una sanidad privada. En este sentido, pienso que la crisis nos va afectar, pero algo menos.
Por otra parte, trabajamos con el SNS para el que realizamos exploraciones y tratamientos. En este sentido, estamos dispuestos a seguir colaborando en función de las necesidades que ellos tengan.
La clínica está asociada con el IDIS. ¿Nos gustaría que nos hablase de la relación con esta institución?
La relación es francamente buena. De hecho estuvimos en la presentación de nuevas propuestas para el sistema sanitario. Fue mayoritaria la asistencia de personas y se realizaron una serie de propuestas interesantes. Hay que tener en cuenta que las personas que tienen un doble aseguramiento, cuando utilizan un servicio privado están dejando de asistir al SNS. Por un lado alivia al SNS y por otro favorece la accesibilidad de los pacientes que acuden al mismo.
Ha sido una buena iniciativa la constitución del IDIS, donde se encuentran empresas aseguradoras, proveedoras e incluso suministradoras. Con lo cual, tener un foro donde podamos poner en común las diferentes problemáticas de los actores que tiene la sanidad privada es interesante. Afortunadamente se ha creado, está dando buenos resultados, ha publicado varios informes de calidad. Es una voz en la sociedad respecto a determinas opciones.
¿Cree que en España permanece el estigma de la asistencia sanitaria privada como un negocio y no como un complemento de la sanidad pública?
Cada vez menos. En primer lugar, la sanidad privada oferta una calidad exactamente igual que la sanidad pública, en lo referente a la calidad intrínseca de las actuaciones sanitarias. La sanidad privada se ha armado de una tecnología y facultativos muy importantes. Además, la calidad percibida es mayor. Es una institución más pequeña y más cómoda para el paciente. Y, por otra parte, nuestra finalidad es la misma, restablecer la salud de los pacientes. Todos tenemos claro que o damos calidad o nuestras clínicas no triunfan. La calidad es uno de nuestros objetivos fundamentales, ya que en estos momentos la oferta pública es lo suficientemente buena como para que si no ofertamos elementos diferenciales no tengamos futuro. Es un estigma trasnochado que ya no es real.
Le queríamos preguntar sobre su propio paso de un sector al otro…
Llevo cerca de 28 años en el sector público dirigiendo hospitales. He dirigido 7 hospitales, algunos de ellos francamente grandes, como el General de Alicante, el Miguel Servet de Zaragoza, el Ramón y Cajal o el 12 de Octubre, que ha sido el último donde he estado cerca de 10 años. Del sector público tengo un conocimiento aceptable. He tenido ahora la oportunidad de conocer la otra cara de la medicina, que hasta ahora no conocía. Soy una persona inquieta y me gusta seguir aprendiendo. Esto me rejuvenece. Tengo mucho interés en conocer esta faceta y es lo que me ha motivado al cambio. Tengo mucha ilusión.
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